Momentos

Existen ciertos momentos en los que uno deja volar la imaginación y se pierde regodeándose dentro de uno mismo.

Son momentos para disfrutarlos, para vivirlos.
Es un verdadero placer dedicarse al menos unos minutos al día para pensar y sentir lo que uno lleva dentro.
Es interesante averiguar quienes somos y que es lo que realmente queremos, no importa estar equivocados, siempre que seamos nosotros los que nos equivoquemos por error propio y no ajeno. Siempre existe la posibilidad de empezar de nuevo.

Desde luego no es un crimen cometer errores, somos humanos.
Pero debemos siempre procurar no arrastrar a nadie con nosotros en nuestras equivocaciones.
Si no somos capaces de ver nuestros errores nunca seremos capaces de arreglarlos ¿no?
Hay una riqueza escondida dentro de cada ser humano, solo hay que atreverse a descubrirla. Se pueden encontrar cosas maravillosas y es una pena que se mueran antes de darles el derecho a la vida.

Todos tenemos sentimientos, pero unos les damos rienda suelta y otros los ahogan.
Es una pena no brindarse oportunidades en la vida porque se pierden demasiadas cosas y cuando queremos darnos cuenta sé nos ha ido volando el tiempo y nos quedamos con las manos vacías.

Es dulce ese sabor de boca del que se relame por dentro, uno puede estar solo pero muy acompañado cuando su mejor amigo que esta en su interior se siente atendido.
Vivimos demasiado deprisa sin detenernos casi nunca a tomar un respiro que le dé oxigeno al ser humano que llevamos dentro.
No estaría mal sacarlo a tomar el aire de vez en cuando, que se diese una vueltita y disfrutara del placer de existir.
Que se solidarizara con otros seres humanos y compartieran el paseo por la vida, seguro que nos encontraríamos con un mundo mejor, más acogedor donde todos tendríamos nuestro propio espacio.

Es difícil compartir cuando nos negamos a recibirnos a nosotros mismos, es una verdadera pena que seamos nosotros los que nos robemos las oportunidades.
Podemos dar tanto y disfrutar haciéndolo que nunca lo comprenderemos hasta que echemos un vistazo en nuestro interior.
Yo soy feliz por haberlo descubierto a tiempo, y cuando miro no me molesta lo que veo porque lo que no me gusta intento cambiarlo, es mi privilegio, y si no lo puedo cambiar totalmente al menos intento.

Es cierto que todo no es un jardín de rosas, que a veces no nos sentimos orgullosos de lo que vemos al mirarnos, pero no debemos ser pesimistas, ni olvidarnos de querernos cada día un poquito más porque es muy difícil dar amor verdadero sino no nos queremos a nosotros mismos, es muy difícil poder hacer felices a los demás si no lo somos nosotros.

Es bueno darnos oportunidades y nunca es tarde para reaccionar y darse cuenta de eso.
Se vive solamente una vez y hay que aprender a disfrutar de la vida, que vivir es maravilloso, disfrutar del presente, del ahora, que si el mañana llega ya habrá tiempo también de disfrutarlo.

Hay muchas cosas en la vida que no tienen precio ni se pueden comprar, creo que esas son las mejores, las que no se encuentran en las tiendas.
Esas son mis preferidas y de esas y de mí quiero disfrutar sin dejarlas escapar ahora que soy más consciente que nunca de lo valiosas que son.