lunes, 10 de mayo de 2010

Tras la mirada

Se sintió observada y se dio la vuelta para encontrarse con sus ojos.
Pudo sentir la intensidad de su mirada, esa chispa de sonrisa atrevida y juguetona mezclada con tanta pasión que la inquietaba.

La miró lentamente acariciándola con los ojos, despacito, subiendo desde los píes, avanzando por sus piernas, recorriendo todo su cuerpo como queriendo desnudarla aun sin tocarla.

Se fue acercando y rodeo su cuerpo, cerca muy cerca, aspirando su aroma, se situó detrás, la abrazo calidamente y la beso en el pelo.

La tenía muy pegada a él y ella sentía su respiración en el cuello, el calor de su cuerpo y como se iba encendiendo cada vez más su pasión.

Juguetón le mordisqueaba la oreja y le besaba el cuello mientras le destapaba un hombro y lo besaba, luego el otro hasta que dejó que la ropa resbalara por su cuerpo hasta caer en el suelo.

Entonces lentamente fue dando la vuelta alrededor de ella, a muy poca distancia, sin dejar de mirarla con ese fuego en los ojos que anunciaba su deseo.

Se paró delante de ella y con un dedo suavemente acarició el canal que formaba su pecho sin dejar de mirarla y fue subiendo hasta su boca, acarició sus labios, tomó su cara entre las dos manos la atrajo y la besó largamente en la boca mientras acariciaba su espalda y sus manos se escapaban hasta sus nalgas.

Su beso resbaló de la boca para bajar por el cuello poco a poco por cada centímetro de piel hasta llegar de nuevo al canal de su pecho.

Levantó la mirada y se cruzó con sus ojos, malicioso sonrió diciéndole:
- ¡No te me vas a escapar!
Ella le devolvió la sonrisa y ya dentro de su boca le respondió:
- Lo haré y me esconderé en la cama, ¡a ver si me encuentras!

2 comentarios:

Juankmu dijo...

Wow, que poema tan rebosante de erotismo. Excelente.

silversroadnottaken dijo...

gracias anaaaaaaaaa por el mensaje y por pasxarteeeeeeeeeeeee lo mismo pa ti... so guapaaaaaaaaaaa